viernes, 13 de mayo de 2011

Investigación, docencia y medicina personalizada, claves en la oncología médica

Carla Nieto, Madrid · 13 Mayo 2011 14:02


Celebrada la segunda edición del encuentro “360º en Oncología”, organizado por Merck Serono.

La situación actual de la oncología médica, la importancia de la investigación clínica, los esfuerzos necesarios en el campo de la docencia o la calidad asistencial de los enfermos oncológicos son algunos de los temas que están debatiendo los más de 50 ponentes que intervienen en la segunda edición del encuentro “360º en Oncología”, que se está celebrando en Madrid los días 12 y 13 de mayo.

Durante la presentación de esta reunión, organizada por Merck Serono, la división biotecnológica de la farmacéutica Merck, el Dr. Eduardo Díaz Rubio, jefe del Servicio de Oncología Médica del Hospital Clínico Universitario San Carlos, de Madrid, comentó que “actualmente la oncología española se encuentra a un magnífico nivel y es una de las más fuertes en Europa en todos los aspectos. Prueba de ello son las más de 110 unidades acreditadas para la formación de residentes y también el hecho de que se haya conseguido que la duración de esta formación sea de cinco años. Sin embargo, para seguir avanzando, es fundamental la investigación, y más concretamente la traslacional, que tiene que llevarse a cabo allí dónde hay pacientes. En este sentido, España también ha sido pionera en el desarrollo de grupos cooperativos”.

En esta misma línea, el Dr. Jesús García Foncillas, jefe del Departamento de Oncología de la Clínica Universitaria de Navarra, señaló que “sería necesario reconducir la investigación básica para que identifique nuevos mecanismos a partir de los cuales desarrollar fármacos novedosos, y la mejor manera de conseguir esto sería a través del establecimiento de redes y grupos cooperativos que permitan a los pacientes beneficiarse de las investigaciones que proceden de los laboratorios. En España hay un gran potencial investigador, pero las dificultades y limitaciones administrativas ralentizan que se pueda sacar partido lo antes posible a los resultados arrojados por la investigación básica”.

Uno de los aspectos fundamentales que se van a tratar en estas jornadas es la repercusión de la actual coyuntura económica de crisis en el campo de la oncología médica. Respecto a este tema, el Dr. Díaz Rubio afirmó que “la crisis está repercutiendo a todos los niveles y concretamente en el campo de la medicina afecta a aquellas especialidades que están en desarrollo, como la oncología médica. Hay que trabajar bajo el prisma de la excelencia y de la calidad, dos conceptos que no pueden comprometerse bajo el argumento de la crisis económica”. Por su parte, el Dr. Carlos Camps, jefe del Servicio de Oncología Médica del Hospital General Universitario de Valencia, comentó que “las situaciones de crisis también suponen oportunidades en el sentido de que instan a plantear soluciones como, por ejemplo, la redefinición de los objetivos de los tratamientos. De ahí que sea tan importante mejorar la calidad de vida de los pacientes y definir muy bien lo que significa conseguir un beneficio clínicamente significativo. Para ello, hay que optimizar los recursos, utilizando tratamientos basados en estudios cualificados. Así mismo, es importante hacer una redefinición de los modelos de gestión de los servicios de oncología, lo que a su vez obliga a planificar nuevas organizaciones hospitalarias. En este sentido, uno de los temas que vamos a tratar en esta reunión será la necesidad de crear unidades funcionales”.

Al hilo de la coyuntura económica, los expertos se refirieron a las desigualdades en cuanto al acceso a las prestaciones sanitarias. “La inequidad es algo tangible, y es absolutamente necesario que haya igualdad en España en cuanto al acceso a los tratamientos. La solución pasaría porque todas las voces autorizadas se sentasen a analizar el tema”, explicó el Dr. Díaz Rubio.

Otro de los temas tratados por los especialistas participantes en la reunión es la necesidad de implantar una medicina cada vez más personalizada. “El objetivo es el paciente y bajo esta perspectiva estamos diseñando el mapa de ruta actual del tratamiento del cáncer. Aunque la medicina personalizada tiene un coste, supone finalmente un impacto positivo en el control de fármacos, ya que se evita su utilización indiscriminada o sin una razón que justifique su empleo”, comentó el Dr. García Foncillas.

Los periodistas Pedro Piqueras y David Cantero son los encargados de dirigir las mesas de debate de esta reunión, caracterizadas por turnos de 60 segundos y que, tal y como explicó el Dr. José Cabrera, director médico de Merck, “constituye un evento innovador que refleja el compromiso de la compañía para contribuir al concepto de medicina personalizada, entendida como aquella que identifica a los pacientes que pueden ser beneficiados de un tratamientos y mejorar la eficacia de dicho tratamiento”.

Un nuevo marcador genético podría permitir curar el 75% de las hepatitis C

JANO.es y agencias

Especialistas reunidos en la IV Jornada de Farmacogenética, celebrada en Madrid, destacan el papel de los polimorfismos en el gen del interferón lambda (IL28B) en la historia natural y la respuesta al tratamiento.

El descubrimiento de un nuevo marcador genético relacionado con el virus de la hepatitis C y su detección en la práctica clínica puede ofrecer “mejoras significativas” en el manejo de los afectados por esta enfermedad, permitiendo la curación del 75% de los pacientes, según han asegurado especialistas reunidos en la IV Jornada de Farmacogenética, organizada en Madrid por el Instituto Roche.

En el marco de dicho encuentro, el Dr. Vicente Soriano, del Servicio de Enfermedades Infecciosas del Hospital Carlos III (Madrid), destacó cómo importantes infecciones virales, como la hepatitis C, se están beneficiando de los avances fármacogenéticos.

En el caso de la hepatitis C, que afecta a unas 700.000 personas en España, de las cuales el 40% desconoce estar afectados por el virus, destacó el descubrimiento del papel de los polimorfismos en el gen del interferón lambda (IL28B) en la historia natural y la respuesta al tratamiento.

Entre otros hallazgos, se ha visto como los pacientes con alelos protectores en la IL28B son los que alcanzan indetectabilidad del virus más rápidamente y una respuesta más sostenida en el tiempo.

Con esta información, se ha creado en España el índice Prometheus, que se asemeja al de Framingham para calcular el riesgo cardiovascular, pero que predice la probabilidad de curación de la hepatitis C en función de 4 variables: IL28B, fibrosis hepática, carga viral C basal y genotipo del virus C.

Por otro lado, los expertos también destacaron las mejores que el conocimiento farmacogenético está posibilitando en el manejo terapéutico de los afectados por el VIH, sobre todo en un uso más racional y dirigido de fármacos antirretrovirales de elección, como abacavir, efavirenz o tenofovir.

“En el VIH estamos asistiendo a una verdadera revolución con la incorporación de herramientas farmacogenéticas, relativamente baratas y sencillas, puesto que nos ayudan a manejar mejor muchos antirretrovirales, aumentando su eficacia y/o reduciendo su toxicidad”, reconoció el Dr. Soriano, quien no dudó de que “esto permite individualizar el tratamiento, maximizando la eficacia y minimizando los efectos adversos”.

Pero donde probablemente se están aplicando con más éxito los conocimientos farmacogenéticos es el campo de la Oncología, según apuntó el biólogo Miquel Tarón, del Servicio de Oncología del Hospital Germans Trias i Pujol (Badalona), quien destacó los progresos registrados en el cáncer de pulmón, y más concretamente en el cáncer de pulmón de células no pequeñas, que se asocia con una mediana de supervivencia de unos 12 meses y que es el tipo más frecuente de tumor pulmonar. En estos casos, aproximadamente un 15% de los pacientes presentan mutaciones en el gen, con la ventaja de que al inhibir la actividad tirosina-cinasa de dicho gen con fármacos específicos se triplica el tiempo de supervivencia del enfermo, en comparación con la quimioterapia convencional.

Además, junto al EGFR, existen otros marcadores que deben ser analizados en pacientes, como el ALK-EML4, Her2 o k-ras entre otros, para “ver si se pueden mejorar el pronóstico de estos pacientes, y adelantar las decisiones clínicas”, señaló el Dr. Tarón.

Según el director general del Instituto Roche, Jaime del Barrio, esto demuestra que “los recursos farmacogenéticos forman parte ya de nuestra vida, han venido para quedarse y para revolucionar la manera en el que entendemos la prevención, el diagnóstico, el tratamiento y seguimiento de las enfermedades”.

El Comité de Bioética espera que la Ley de Ciencia cree un órgano de arbitraje de la integridad científica

JANO.es y agencias · 06 Mayo 2010 09:09

Dicho órgano deberá gestionar los problemas de integridad científica en España y estar al servicio de la comunidad y de los organismos e instituciones científicas.

El Comité de Bioética de España (CBE) espera que la futura normativa de Ciencia, Tecnología e Innovación, que irá al Consejo de Ministros en 'segunda vuelta' este mes, cree un órgano de arbitraje para gestionar los problemas de integridad científica en España, al servicio de la comunidad y de los organismos e instituciones científicas.

Así lo ha explicó ayer Jordi Camí Morell, portavoz del CBE, a la vez que señaló que el Ministerio de Ciencia e Innovación podría fomentar esta medida aprovechando la publicación de la futura normativa del ramo y, de igual forma, acoger el documento de recomendaciones que acaba de redactar y aprobar el CBE -en el que se enmarca esta propuesta de órgano de arbitraje-, para promover el establecimiento de Códigos de Buenas Prácticas Científicas (CBPC) en todos los estamentos y ámbitos implicados en la investigación.

El CBE considera que entre las funciones de este órgano deberían incluirse el arbitraje de conflictos o la promoción y defensa de las prácticas científicas adecuadas. Por ejemplo, detalla que entre los problemas "más graves" de la integridad científica destacan la falsificación, la elaboración ficticia o el plagio.
Los CBPC recogen un conjunto de reglas, recomendaciones y compromisos para ser observados por el personal científico, los centros de investigación, los organismos adjudicatarios de ayudas de investigación e incluso sociedades científicas, con objeto de favorecer la calidad de la investigación y prevenir problemas de integridad.

España es de los pocos países europeos que aún carece de una reglamentación específica para prevenir los problemas de integridad científica, según apunta el CBE, al tiempo que señala que no existe tradición en la implantación generalizada de buenas prácticas científicas, sin que las administraciones hayan propiciado su adopción hasta el momento.
De esta forma, el CBE ha reiterado que no basta con aceptar que existen problemas en la Ciencia sino que deben desarrollarse medidas para su prevención, fomentando el ejercicio de la actividad científica en un marco de responsabilidad "acorde con los mejores valores".

Concretamente, considera que no basta con reconocer que algunos investigadores pueden no actuar con la suficiente integridad que su trabajo requiere, sino que es necesario instrumentar códigos que propicien el comportamiento más responsable posible en el ejercicio de la investigación científica.
Por otro lado, el documento insiste en el respeto por la vida, la ley y el interés público, de forma que las propuestas de trabajos impliquen a personas, animales y al propio medio ambiente, se analicen y justifiquen adecuadamente.